Autor: Rafael Villegas
En los tiempos que corren, cualquier declaración artística que proponga un conjunto de preceptos —tomas de postura, declaraciones de principios, manifiestos— se ve con sospecha, quizá como herencia de cierto relativismo finisecular que, después de todo, nos condujo más hacia la tibieza de espíritu que hacia los matices que posee toda experiencia subjetiva. Por eso este libro, que en el nombre lleva un destino, no es tibio, sino ardiente: un ojo salvaje que ilumina lo que mira para, sosteniendo esa lumbre, enfrentar lo que guarda la oscuridad.
Rafael Villegas es, y ha sido desde hace tiempo, uno de los autores más originales de la literatura fantástica mexicana. Basta notar la provocación implícita en Juan Peregrino no salva al mundo, Apócrifa o Lengua Noche, cuya visión de autor siempre se materializa en formas singulares, ya sea apostando por la belleza de una gráfica inquietante, la traviesa ambigüedad entre realidad y ficción o el arrojo de la autoedición; sin descuidar el delicado equilibrio entre la absoluta libertad con que se desenvuelve en su propia imaginación y la sofisticada influencia que el sueño, el arte, el cine, la historieta y la memoria del archivo histórico tienen en su obra.
Con Manifiesto, Rafael Villegas se convierte en un espectro del sueño que vuelve al inframundo de su propia invención para obsequiarnos una segunda mirada sobre su narrativa. Lejos de perder eso que fue a rescatar o convertirse en estatua de sal, muta en un espectro-explorador que sigue ascendiendo hasta llegar a la cima de una montaña, donde la claridad del aire le permite vislumbrar con lucidez lo que vendrá.
Agradezco que su lumbre arda dentro de las paredes de esta Casa Futura.
Gabriela Damián Miravete
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CARACTERÍSTICAS
Formato
12.5 x 19 cm
Núm. de páginas
272
Peso
300 g
Ilustración de portada
Aricollage
Pasta blanda